Fue en el 2014 que James Gunn (el director de The Suicide Squad) apostó todo lo que tenía con Guardians of the Galaxy Vol 1, y ahora en el 2023 se despide de aquellos incomprendidos héroes de la galaxia en Guardians of the Galaxy Vol 3.

El argumento es sencillo: el filme inicia tiempo después de la batalla contra Thanos en donde Gamora perdió la vida.  Aquí Star Lord aún sufre la pérdida (recordando que existe otra Gamora de otra dimensión que no le recuerda), mientras que los demás tratan de instalarse en Knowhere, aquel “planeta” abandonado.  Ahí reciben el ataque de Adam Warlock, quien hiere de gravedad a Rocket y será este el detonante para que los Guardianes salgan a buscar por el espacio todo lo necesario para salvar a su amigo.  Ahora bien, esta película llega en un momento delicado para la compañía.  Su último gran éxito rompedor fue Spider-Man: No Way Home, luego tanto en series como películas ninguna han logrado alcanzar el éxito de costumbre.  De hecho, “Ant Man and the Wasp: Quantunmania” es considerada un fracaso, siendo esta la primera película abiertamente sobre el multiverso y con el main villain.  Entonces con un UCM que parece que se le gastaron las ideas (o que no tiene un rumbo claro o llamativo, como quieran ponerle) y este cierre a una de sus más grandes franquicias, acentúa un tono de despedida.

James Gunn para esta Guardians of the Galaxy Vol 3, ha eliminado la frescura, la camaraderia, ha reducido los guiños de los ochentas, el humor absurdo (y a veces negro) fueron tambien eliminados, y en cambio nos entregan una historia un poco mas madura (aunque no mejor trabajada) sobre las perdidas, el perdon y el seguir adelante.  También un humor que funciona por momentos, siendo esto bastante ligero pero no por eso bueno (dañan dos grandes momentos para lucir al personaje de Warlock por una comedia metralla).

Da la sensación de ser, por una parte, una fiesta de cosplay carísima inundada de individuos a cual más extravagante, y por otra una consolidación de todo lo que salió en una tormenta de ideas muy loca de la que no se descartó ni una sola de ellas. 

El gran protagonista no es Peter Quill esta vez, sino que el foco recae en Rocket Raccon a quien se le da una historia de origen bastante conmovedora e inteligente.  En esto la película no se pierde, en sus desarrollos (a pesar de faltarle profundidad).  Cada personaje va evolucionando a como lo vimos al inicio del filme a como termina, y si bien es cierto que algunos están más atropellados que otros (Mantis pudo mejorar), ninguno se queda fuera.  A pesar de estos detalles, y también de un deseo a veces contraproducente de intentar abarcar más de lo que puede o necesita, porque en sus más de dos horas, tiene momentos que pudieron reducirse o en su defecto, eliminarse y la película no se ve afectada en nada (los casi 20 minutos que llegan a ContraTierra son totalmente innecesarios).


En cuanto a lo técnico, pues lo de siempre: John Murphy en la música, nada nuevo ya que es un gran colaborador de Gunn.  Henry Braham en la fotografía, que tampoco es nuevo.  Y bueno, después todo lo de siempre.  Las actuaciones, pues, no es que sean una maravilla aunque Karen Gillan como Nebula, Pom Klementieff como Mantis y Chukwudi Iwuji como El Alto Evolucionador estan abordados con mucha altura.  Sin duda los mejores.

Guardians of the Galaxy Vol 3 es una divertida película que, si te gusta Marvel la disfrutaras, y más si eres de los que prefieren los filmes de EndGame para atrás.  De no ser así, pues es una película correcta con unos cuantos defectos, que no dejarán buen sabor a boca.